El colágeno de tipo IV mantiene la división y el crecimiento celulares.
[5] La secreción anómala del colágeno afecta a la formación de la membrana basal.
[6] En el cáncer de estómago está sobrexpresado el gen del colágeno tipo IV, α1 (COL4A1).
[7] Una mutación en COL4A1 contribuye a las hemorragias intracerebrales en adultos y niños.
[8] La enfermedad cerebrovascular es consecuencia de mutaciones en COL4A1 y COL4A2.
[9] Se ha observado que el colágeno tipo IV desempeña un papel clave en la angiogénesis, las enfermedades neurológicas y las metástasis.
Durante el desarrollo, el colágeno IV está ubícuamente distribuido en las membranas basales. Durante el proceso de maduración, esta red es parcialmente sustituida de una manera muy específica de tejido, lo que define la estructura y la función de la membrana basal. Se ha demostrado que el colágeno IV se une a plaquetas, hepatocitos, queratinocitos, células endoteliales, mesangiales y pancreáticas, y a algunas células tumorales.
La lesión tisular en la enfermedad autoinmunitaria síndrome de Goodpasture se debe a autoanticuerpos patógenos dirigidos contra la cadena α3 del colágeno IV. Mutaciones en el gen COL4A5 están asociadas con el síndrome de Alport